Si nuestro sustento económico está basado en la rentabilidad que produce poner a trabajar un camión, lo apropiado es que el mismo opere adecuadamente por diversas razones. En caso contrario, correríamos el riesgo, no solo de perder el ingreso en cuestión sino que se afectarían otras cosas más.
En líneas generales, lo que afecta la funcionalidad del vehículo de carga sería lo siguiente:
- Seguridad: es el principal y más preocupante riesgo que se corre, pues se pone en juego la vida del conductor y de cualquier otro individuo que desafortunadamente se vea involucrado en un incidente que genere el camión. Por lo tanto, hay que ser sumamente responsable con las condiciones en las que se saca a trabajar este tipo de vehículos, ya que por su gran tamaño las consecuencias pueden ser fatales.
- Prestigio: es otro de los factores que debe inquietar, porque la reputación de un negocio, sea autónomo o pertenezca a una empresa, es lo más preciado. Gracias a la imagen que proyecte ganará contrataciones, obtendrá respuestas afirmativas independientemente de lo que cobre (por supuesto, dentro de un rango justo). Y verse involucrado en un suceso nefasto, podría acabar con su prestigio.
- Inversión: si bien este tipo de servicio debe contar con el respaldo de una aseguradora, sabemos que éstas no siempre reconocen en su totalidad las indemnizaciones, sobre todo, si se llega a comprobar que hubo negligencia en el mantenimiento del vehículo. Y no solo se trata de los daños de la máquina sino también de la carga que transporte.
En consecuencia, lo mejor es tener al camión o flota de camiones en el mejor estado posible. Cumplir la programación de revisiones preventivas, aun pensando que todo funciona a la perfección. Claro está, reparar cada avería que se presente. Nunca está demás hacer un chequeo antes de cada viaje y al regresar.
Sin embargo, pese a todos los cuidados que se apliquen, como cualquier otra máquina se va desgastando con el tiempo, hasta agotar su vida útil. Cuando las reparaciones son requeridas con mayor frecuencia y el gasto que se deba hacer sea bastante elevado, hay que cuestionar la conveniencia de mantenerlo en la vía o sacarlo de circulación.
Tampoco hay que pensar que se perderá esa inversión, pues actualmente existen los Centros Autorizados de Tratamiento de Vehículos y algunos se especializan en camiones, también conocidos como desguace camion que ofrecen excelentes tasaciones. Es cuestión de preguntar en varios de ellos.